miércoles, 15 de noviembre de 2017

 Pongamos fin al littering
Ninguna de esta basura ha sido usada por mi. Sin embargo me siento responsable de ella. La responsabilidad la tenemos todos, pero sólo podemos ejercerla quien se hace consciente del hecho.  

A menudo salgo a la naturaleza a pasear por sus hermosos parajes, oir sus sanadores sonidos, respirar sus ricos y estimulantes olores; SENTIRLA. Sentir la naturaleza siempre me ha hecho bien, y desde hace años, es mi actividad mas amada, diria que en mi es una necesidad.

En mis salidas a la naturaleza encuentro todo tipo de objetos tirado, dejado por los caminos, senderos o zonas de recreo en los bosques; muchos de ellos suelen ser objetos de plasticos como botellas bolsas garrfas de productos agricolas, sacos, cuerdas, y ruedas; En las zonas de recreo de bosques suele haber muchas latas de bebidas y de comida, aparte de bolsas, servilletas, cubiertos, vasos y platos de plastico; Muchas zonas son autenticas escombreras, donde de paso, también se  usan para dejar el frigorifico, la lavadora, inodoro etc se lleva al bosque todo aquello, que al hacer la reforma en la casa nos sobra, a pesar de que ya, sí, hay puntos limpios. Tambien hay siempre montones de colillas y toallitas usadas para fines higuienicos y que se deja por doquier de manera muy poca higuienica para la naruraleza. botellas de cristal de bebidas, en su mayoria de cervezas. De estas tambien hay muchas en las cunetas de las carreteras. Tengo mi jardin cercado con todas esas botellas que me encuentro en la carretera camino a mi finca, y son muchos los jardines que tengo...

Cada vez que me voy con el cohe a estar varios dias recorriendo sus senderos y montes, me vuelvo con bolsas llenas de basura, recogida en los parajes por donde camino o aparco.
Ver toda esta basura me produce una sensación de tristeza. Tristeza por la inconsciencia, por la estupidez y ceguera humana. Se deja todo tipo de cosas contaminantes y no biodegradable en la naturaleza, la usamos como vertedero, como un recurso para dejar limpia nuestra casa, jardin o coche;  sin darnos cuenta que al hacer eso estamos destruyendo La plataforma que sostiene todo eso. La fuente de vida que es la propia tierra; es como tirar piedras a nuestro propio tejado. Pero la inconsciencia de la humanidad hace que eso no se perciba y actuemos de forma tan sumamente irresponsable.
Es por ello que tengo en mente organizar un evento para limpiar los 83km del rio bullaque que tan lleno de basura plastica esta. Este sera un evento tambien de concienciacion, en el cual voy a intentar de implicar a los ayuntamientos de Piedrabuena, Porzuna, El Robledo y El Torno.

Los Loris/ no mascotas


En teoría todas las especies de este animal por las legislaciones del Sureste Asiatico y por la convención sobre el comercio de especies en peligro de extinción (CITES). Pero la cruda realidad es que cada año se capturan muchos loris en los bosques de abundantes lluvia, que son los lugares donde  habitan. Se venden por internet fuera del país y en mercados locales de fauna salvaje.

.Antes de venderlos les extraen sus afilados dientes y de una manera muy dolorosa, diría sin escrúpulo; pero el escrúpulo y el respeto esta carente en el simple hecho de utilizar a los animales para satisfacer nuestros deseos y caprichos. Cómo somos tan egoicos y carente de cordura.
En un articulo de la revista de National Geographi comentan que en un estudio del 2016, investigadores de la UniversidadOxford Brooks examinaron un centenar de videos d3 loris domesticados, colgados de internet, y concluyeron  que todos sin excepción Vivian en condiciones antinaturales, estaban enfermos y sufrían. "son animales nocturnos y muy sensibles, a los que no les gusta que los toqueteen." Dice Christine Rattel.. " La destrucción del hábitat se ha cobrado su precio, como lo ha hecho la caza furtiva destinada a surtir a la medicina tradicional Asiática; si no se frena el trafico de mascotas, el loris estará a un paso de la extinción".

Sólo una cosa, antes de decidir coger un Loris, o cualquier animal salvaje como mascota, permítanse un espacio para una seria reflexión y si aun así van a por ello, les reto a la experiencia siguiente: tómense un tiempo para mirarlo a los ojos, haz de ese instante una meditación, una mirada de comunión con el animal. Y verán qué pasa.